Bohol es uno de los destinos más diversos y atractivos de Filipinas. Con una superficie de 4.117 Km2, es esencialmente una provincia agrícola, con cultivo de arroz, coco y maíz como productos principales.
Se encuentra ocupada por innumerables playas de arena blanca y un interior montañoso. En ella encontraremos además las singulares terrazas de arroz, numerosas iglesias históricas, torres de vigilancia, encantadoras cascadas y cuevas, las impresionantes colinas de chocolate y el Santuario Tarsier, donde observaremos a este pequeño primate de enormes ojos y en peligro de extinción, en su hábitat natural.
Éste área posee además una biodiversidad marina famosa en el mundo entero, lo que la convierte en un lugar excelente para practicar submarinismo. El buceo es variado, con escarpados acantilados, cuevas y jardines de coral. Adecuado para principiantes y avanzados, y con una visibilidad a veces cercana a los 30 m, las inmersiones se comparten con peces loro, peces napoleón, caballitos de mar pigmeos, coloridos nudibranquios, peces pipa y las curiosas tortugas verdes. En cotas más profundas encontramos también pelágicos como los atunes y las barracudas..