El Océano Pacífico es para los buceadores lugar de grandes encuentros. Repleto de vida en su interior, alberga mágicos y únicos lugares como las Islas Galapagos, la Polinesia Francesa o la Isla del Coco, verdaderos tesoros submarinos famosos por la abundancia de grandes pelágicos y especialmente, tiburones.
Se trata del océano más grande de La Tierra, y ocupa nada menos que la tercera parte de su superficie. En él se sitúa también la fosa oceánica más profunda conocida, la Fosa de las Marianas, con aleredor de 11 kilómetros de profundidad. Toma su nombre del navegante portugués Fernando de Magallanes, primer europeo que cruzó desde el Atlántico al Pacífico, quien le puso su nombre en honor a la inusual calma que se encontró navegando por sus aguas, que sin embargo suelen ser bastante menos tranquilas debido a la actividad sísmica y otros fenómenos meteorológicos.
Laberinto de pequeños mares, en su extensión se distribuyen alrededor de 25.000 islas, flanqueadas por arrecifes, manglares y montañas submarinas plagadas de vida.
Cualquier cosa puede suceder en el Pacífico, desde la observación de maravillosas ballenas y otros grandes cetáceos, o recorrer la interminable Barrera de Coral Australiana hasta un "baile" con las mantas gigantes pasando por inolvidables juegos con los leones marinos, el buceo entre grandes bancos de tiburones, la exploración de enormes pecios o lagunas plagadas de medusas, etc...
El buceo en el Pacífico es sin duda, un imprescidible para cualquier buceador.